Bien, como todos sabemos y podemos experimentar cada día, las
tecnologías de la información y la comunicación forman una parte importante de
nuestra vida. El acceso a este tipo de dispositivos parece esencial y, de
hecho, el Banco Mundial ha definido el acceso que los países tienen a estas
tecnologías como uno de los cuatro pilares para medir su avance económico (Cobo,
2009). Por ello, es inevitable a la vez que necesario incluir las TIC en la
educación.
Alumno: ¿Eso
quiere decir que las TIC están incluidas en el currículo educativo?
P: Eso es y,
además, están incluidas (o deberían estarlo) de una forma especial. Se
definen en el currículo como un grupo transferible de capacidades referidas al
uso de las TIC, es decir, que las tecnologías son herramientas que podemos usar
en muchos contextos (Kaffash,
Kargiban, Kargiban, Ramezani, 2010).
A: Osea que
las TIC en el currículo tienen un carácter interdisciplinar, se integran con
otras asignaturas.
P: Y se
centran en el conocimiento y el aprendizaje de herramientas centradas en las
capacidades que se desarrollan a través de ellas.
Ahora bien, ante esta incorporación de
las TIC y su carácter integral y transferible yo os pregunto: como futuros
docentes, ¿os veis preparados para enseñar incorporando las TIC en las aulas y
el currículo?
A1: Yo pienso
que, en general, sí. Aunque quizá sabemos y en la universidad nos enseñan más
aspectos didácticos y pedagógicos que tecnológicos (Gallego, Gámiz, Gutiérrez, 2010).
A2: Sí, quizá
deberíamos tener más formación en TIC desde el inicio de la carrera (Gallego, Gámiz, Gutiérrez, 2010).
A3: Y no sólo
durante la carrera, sino también después… ¡hay que actualizarse!
P:
Efectivamente, la formación y la actualización del profesorado es el camino
adecuado para conseguir una adecuada incorporación de los recursos tecnológicos
al terreno educativo (Madrid,
Mayorga, Núñez, 2011).
A: Pero hay
muchos profesores que no tienen una actitud favorable ante las TIC y no las
aprovechan como deberían…
P: Es lo que
se conoce como tecnofobia docente (Madrid, Mayorga, Núñez, 2011). Por ello, la formación de los docentes debe ser
fundamentalmente práctica y vinculada a la realidad educativa de las aulas, sin
olvidar el conocimiento y la capacidad de generación de materiales digitales.
La formación del profesorado en TIC es una de las áreas prioritarias en la
actual sociedad del conocimiento (Madrid, Mayorga, Núñez, 2011). La tecnología forma parte de sus aulas, es una realidad
ante la que no pueden desentenderse, sino estar abiertos, prepararse y adquirir
nuevas metodologías en base a los nuevos tiempos. De esta forma, se